Mensaje del rector
Cristian Nazer A.
Durante 34 años, en la Finis Terrae, hemos ido construyendo con mucha seriedad un proyecto educativo que puede ofrecer al país profesionales bien preparados y comprometidos con la sociedad. Es un trabajo en permanente dinamismo, sustentado en una misión que mira a la persona como su centro, con la consciencia de que es ahí donde se realizan los cambios profundos, donde se cimentan las bases sólidas del desarrollo futuro. En esta línea, hay cuatro puntos que debemos abordar de manera prioritaria. Primero, y siendo el fin de una universidad, la búsqueda de la verdad, es nuestro deber y una necesidad indeclinable seguir trabajando en pos del fortalecimiento académico a todos los niveles con la consciencia de que allí se encuentra el núcleo y el motor de nuestro ser universitario. Debemos, a la par, avanzar en la institucionalización de los procesos, logrando la consolidación de una cultura de modelos de calidad y de excelencia; de programación y evaluación constante que nos faciliten la labor de ocuparnos del núcleo de nuestra misión: la formación integral de nuestros alumnos. En tercer lugar es necesaria la consolidación de la infraestructura. Será necesario construir nuevos espacios para la docencia, la investigación y la convivencia universitaria, de modo de hacer frente al crecimiento de la Finis Terrae y favorecer el proceso integral de enseñanza-aprendizaje. Y por último, lo más importante. Para que nuestra misión se haga realidad, para que la academia alcance niveles de excelencia y los procesos funcionen adecuadamente contribuyendo a la misión, es vital la creación de comunidad. La “común unidad” se da, como sugiere la misma palabra, en torno a un ideal y se nutre del mismo. Ideal que en nuestro caso se sintetiza en el lema universitario “vencer al mal con el bien” y en nuestro eslogan “ser mejor”. Dos ideas que deben ser a la vez inspiración y motor de nuestro quehacer. En lo personal, ser partícipe de este proyecto es sin duda un privilegio, que entusiasma y que da sentido al quehacer de cada día.
Discursos de inauguración año académico
Descargar discurso completo...Es una fecha significativa la que nos convoca, nuestra Universidad cumple 30 años. Y si bien, como es lógico, ha experimentado transiciones importantes, debemos decir que se han mantenido inalterables los ideales fundacionales de ser opción que brinde una educación de excelencia y la valoración de la educación privada como un aporte fundamental al desarrollo del país.
Descargar discurso completo...A un poco más de un año de distancia, debemos reconocer que la decisión de adscribir a la política de la gratuidad fue, a pesar de las dificultades que ha traído y las incertidumbres que trae aparejada, una decisión acertada".
Descargar discurso completo...La mayor contribución que podemos hacer al país; a los jóvenes que siguen viendo en la educación superior la mejor herramienta para desarrollarse y para hacer surgir su nación, a ésta tan golpeada sociedad y llena de desconfianzas; es ser coherentes. Si hacemos lo que pensamos, no sólo como institución, sino también, y muy especialmente, como personas, estaremos aportando a Chile el mayor regalo que le podemos dar.
Descargar discurso completo...Hace muy poco tiempo hemos concluido el trabajo de autoevaluación institucional en el contexto de la reacreditación de nuestra Universidad. Y este proceso arduo, que involucró a muchos de los que están hoy aquí, a quienes públicamente quisiera agradecer, me ha permitido reflexionar en la historia de nuestra Finis Terrae.
Descargar discurso completo...Fortalezcamos la academia, institucionalicemos los procesos, consolidemos la infraestructura, pero por sobre todo, creemos comunidad, así la excelencia se hará realidad.
Descargar discurso completo...Cumplimos 25 años de vida. Muchos me han oído decir que uno de los primeros consejos que recibí de un sabio rector con el que me tocó iniciar mi vida universitaria es el no dejar nunca de tener en mente que las universidades no pueden ser medidas en años o décadas, ya que están llamadas, por su naturaleza, a proyectarse en los siglos.
